Seguramente muchas veces has comprado una especie nueva o crees que tu planta necesita un trasplante pero no sabes bien por dónde empezar. Desconoces cómo hacer un buen trasplante, qué necesita realmente tu planta e incluso sientes un poco de vértigo por si el cambio de maceta no va como debería. ¡No te preocupes! En este artículo te explicamos con detalle qué pasos seguir para que sea todo un éxito.
Índice
Cómo saber si mi planta necesita un trasplante
Antes de nada, es importante conocer si nuestra planta necesita un cambio de maceta.
En la naturaleza, las plantas extienden sus raíces tanto como les sea necesario para buscar agua y nutrientes. Con pocas excepciones (bromelias y otras plantas epífitas). Por el contrario, las raíces de nuestras plantas de interior están “confinadas” en su recipiente, siendo nosotros los únicos que podemos proporcionarles nuevos nutrientes y la humedad que requieren.
Una de las maneras de detectar que necesitan un nuevo hogar es observar que sus raíces han invadido el tiesto. Cuando esto ocurre, la tierra se seca enseguida y nos pide más agua y abono. Cabe destacar que a veces no basta con observar a la planta para saber si necesita un cambio. Por lo que hay que sacarla de la maceta y examinar el cepellón y el sistema de raíces.
Otro síntoma visible sucede con las macetas de plástico. Cuando las raíces de la planta y su crecimiento rompen el tiesto, nos están pidiendo a gritos un trasplante.
Por último, es importante recordar que cuando compramos ejemplares nuevos es aconsejable trasplantarlos para aportarles un sustrato, nutrientes y contenedor adecuados.Con el paso del tiempo y a medida que la planta absorba los nutrientes, vas a necesitar renovar el sustrato. Tiempo después, las plantas crecen y necesitan una maceta más grande donde crecer felices.
Las especies de crecimiento más lento, aunque no veas cambios en su tamaño, hay que trasplantarlas cada uno o dos años para renovar el sustrato, que está agotado y pobre de nutrientes.
Cada cuánto tiempo es aconsejable trasplantar
Aunque no existen reglas universales que se puedan imponer a todas las plantas, es aconsejable renovar su sustrato una vez al año o cada dos años. Con el paso del tiempo y a medida que la planta absorba los nutrientes, necesitarás renovar el sustrato y cuando crezca, pasarla a una maceta más grande.
Qué época del año es mejor para trasplantar
El mejor momento para trasplantar, ya estés en el hemisferio norte o sur, es a finales del invierno y principios de la primavera. Justo un poco antes de su época de crecimiento. Recomendamos no trasplantar ni durante ni antes de la temporada de reposo, ya que no se producirán raíces nuevas que penetren en la tierra recién puesta.
Cómo plantar y trasplantar
“Trasplantar” puede significar tanto pasar los esquejes y plantones a una maceta como cambiar una planta a una maceta mayor. Esta segunda operación debe realizarse al comenzar la época de crecimiento como hemos comentado anteriormente.
Aconsejamos no trasplantar una planta enferma porque le produciría un trauma innecesario.
Tampoco es recomendable abonar una planta recién trasplantada hasta pasadas cuatro a seis semanas. Si añadimos un sustrato rico en materia orgánica y mezclado con abono, es preferible no volver a fertilizar.
Cómo trasplantar una maceta pequeña
- Pon la palma de la mano sobre la tierra con el tallo principal entre los dedos
- Vuelca la maceta y golpéala suavemente contra el borde de una mesa
- Entonces la planta y el cepellón se deslizarán saliendo del tiesto
- Añade la mezcla del sustrato a la nueva maceta, planta y aprieta ligeramente
- Riega abundantemente con agua. Lo más aconsejable para evitar futuros dramas con excesos o falta de riego es utilizar alguna olla de autorriego natural idónea para plantas pequeñas. Un buen consejo es añadir en la mini olla o tubo unas gotas de fertilizante líquido y dejar a la planta un periodo de adaptación. También puedes utilizar una maceta de autorriego ideal si lo que deseas es despreocuparte con los riegos.
Recomendamos trasplantar a una maceta un poco más grande, unos 3 o 5 cm de diámetro superiores a la maceta actual. Si ponemos una planta pequeña en un macetero demasiado grande corremos el riesgo de que no sobreviva.
Si quieres conocer con detalle cómo elegir la mejor maceta para tu planta no te pierdas este artículo.
Cómo trasplantar una maceta grande
- Pasa la hoja de un cuchillo o una espátula por el borde del sustrato
- Apoya el tiesto sobre un lado y golpéalo con un trozo de madera para desprender el cepellón. Gire lentamente el tiesto, golpeando por todas partes. Mientras lo hace, sujete la planta con la mano.
- Asegúrate de que la planta esté suelta antes de tratar de sacarla de la maceta. Si la planta es muy grande, necesitará cuatro manos: dos para sujetar la planta y dos para tirar del tiesto.
Cómo trasplantar un cactus
- Para manejar un cactus y no pincharnos, podemos utilizar guantes especiales o directamente utilizar un trozo de cartón para proteger las manos
- Enrolla la tira de cartón sobre el cactus asegurándote de que sobra el suficiente papel para hacer de “asa”
- Sujeta el “asa” de papel con la mano y tira suavemente de una maceta a otra.
Qué sustrato elegir para el trasplante
Sustrato genérico para todo tipo de plantas
2 partes de tierra negra (sustrato universal o turba)
1 parte de humus de lombriz o compost
1 parte de perlita
½ de vermiculita
Sustrato de gran calidad para plantas de interior
(helechos, plantas tropicales)
1 parte de turba
1 parte de humus de lombriz
1 parte de fibra de coco
1 parte de perlita
½ de carbón vegetal
½ de vermiculita
Si quieres no complicarte haciendo tu propia mezcla, aquí te dejamos un sustrato orgánico premium listo para usar:
Sustrato para cactus y suculentas
2 partes de sustrato universal o turba
1 parte de humus de lombriz o compost
¾ de arena gruesa
½ partes de vermiculita
½ parte de perlita
½ parte de carbón vegetal
Replantar en la misma maceta
No siempre las plantas deben cambiar de maceta. Si las raíces no han invadido el tiesto o si es una planta que prefiere una maceta pequeña, basta con replantar: sacar la planta de la maceta y ponerla de nuevo en el mismo tiesto con un sustrato renovado.
- Saca la planta despacio de la maceta. Si la riegas una hora antes, saldrá mejor del recipiente.
- Limpia la planta evitando dañar las raíces y el cepellón
- Limpia la antigua maceta y, en el caso de ser una maceta de terracota, moja el barro hasta que dejen de salir burbujas para que luego no absorban el agua de la tierra.
- Renueva el sustrato, planta y riega abundantemente
Cambiar la tierra superficial
Por último, en el caso de que las plantas estén felices en su maceta pero necesitan comida, puedes remover el sustrato y cambiar la tierra superficial preferiblemente en primavera. Tras esto recomendamos añadir sobre la capa algún fertilizante de liberación lenta. Regar posteriormente ¡y listo! Acolchar la superficie para mantener una buena humedad.
También te puede interesar
[/et_pb_text][/et_pb_column] [/et_pb_row] [/et_pb_section]Especialista en el cuidado orgánico de Plantas y Flores
Bonjour! Soy Quentin y tras vivir en grandes ciudades como Bruselas y Sydney me di cuenta de la falta de información sobre jardinería urbana. Por ello, decidí (re)conectar con la naturaleza y aprender más sobre la Permacultura y el cuidado de plantas.