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El Árbol de Jade (Crassula ovata) es una planta suculenta originaria de Sudáfrica y Mozambique. Su nombre proviene de su característica apariencia de un arbusto pequeño con hojas gruesas y carnosas que parecen estar hechas de jade, un mineral que simboliza la buena fortuna. En su entorno natural, puede crecer hasta alcanzar varios metros de altura, aunque en interiores se mantiene más compacto. A lo largo de los años, esta planta se ha ganado la popularidad no solo por su resistencia, sino también por su vinculación con la prosperidad y la buena suerte en varias culturas.
Reproducir el Árbol de Jade es una excelente práctica tanto para el bienestar de la planta como para tu entorno. Además de ser un proceso relativamente sencillo, la propagación de esta suculenta promueve su crecimiento saludable. Los esquejes, hojas o semillas permiten crear nuevas plantas que pueden elevar la vibra de tu hogar o ser un regalo significativo para familiares y amigxs. De acuerdo con el Feng Shui, regalar un Árbol de Jade simboliza la abundancia y la buena fortuna, un gesto lleno de energía positiva, ¿no crees?
Índice
Reproducir el Árbol de Jade no sólo te ofrece la posibilidad de tener más “plantas gratis”, si no que también beneficia a la planta madre. Cuando se realiza de manera correcta, la propagación fomenta el crecimiento de la planta original, permitiéndole crecer feliz. Al cortar esquejes o permitir que nuevas plantas crezcan, se estimula la creación de nuevas raíces y follaje, lo que mejora la estructura general de la planta. Además, al hacer esto, se evita el desgaste o el crecimiento excesivo que podría comprometer la salud de la planta madre.
Para los Plant Lovers, reproducir el Árbol de Jade es una excelente manera de aumentar su selva o incluso compartir su belleza con otras personas. Además, te ofrece la oportunidad de experimentar en un nivel más profundo con el cuidado de las plantas, aprendiendo con cada etapa. Ya sea para ti o para obsequiar a otros, la reproducción de este árbol suculento te enganchará.
Hay varias formas de cómo reproducir o propagar tu árbol de jade, y a continuación te las explicamos todas y te contamos cómo hacerlo de forma sencilla.
La forma más común y eficaz de propagar el Árbol de Jade es mediante esquejes. Para hacerlo, selecciona un tallo sano de unos 10 cm de largo y córtalo cuidadosamente con una herramienta de corte afilada y esterilizada. Deja que el esqueje repose en un lugar seco y cálido durante unos días para que se forme un callo en el extremo cortado. Este paso es crucial para evitar que la planta se pudra al entrar en contacto con la tierra. Una vez que el callo se haya formado, planta el esqueje en un sustrato ligero y bien aireado, manteniéndolo ligeramente húmedo. También este esqueje puede reproducirse en agua dejando también que seque el corte durante 1 o 2 días. Coloca el extremo cortado del esqueje en el agua, asegurándote de que el nodo donde se formarán las raíces esté completamente sumergido, pero no las hojas. Una vez haya producido la suficiente cantidad de raíces para adaptarse al sustrato, podrás plantarlo en maceta.
Otra manera simple de propagar el Árbol de Jade es mediante una hoja. Para esto, selecciona una hoja sana y córtala de la planta madre con cuidado desde la parte que se une con el tallo. Deja que la hoja repose durante unas 24 horas en un lugar seco para que forme un callo. Después, colócala sobre un sustrato ligero, sin enterrarla completamente, y mantenla ligeramente húmeda. Con el tiempo, la hoja desarrollará raíces y eventualmente crecerá una nueva planta. Aunque este método puede llevar más tiempo que los esquejes, es igual de efectivo y es incluso más sencillo.
Aunque la propagación por semilla es menos común, también es posible cultivar un Árbol de Jade a partir de semillas. Si decides usar este método, asegúrate de obtener semillas de una fuente confiable, ya que las semillas de alta calidad son esenciales para el éxito. También puedes esperar a que tu planta madre, normalmente la que tengas en el exterior, de flores, sean polinizadas por insectos, y obtén de ahí las semillas. Siémbralas en un sustrato bien aireado y ligeramente húmedo, cubriéndolas ligeramente con tierra. Mantén las semillas en un ambiente cálido y con buena luz indirecta. Este proceso puede tardar más tiempo en comparación con la propagación por esquejes o hojas.
La época cuando es mejor reproducir el Árbol de Jade es durante la primavera o el verano, cuando la planta está en su período de crecimiento activo. En estos meses, las condiciones son ideales para que los esquejes o las hojas enraicen rápidamente, y las semillas germinen con mayor facilidad. Durante el otoño e invierno, el crecimiento de la planta se ralentiza debido a las bajas temperaturas y la menor cantidad de luz solar, por lo que la reproducción en estos meses podría ser menos efectiva. Asegúrate de que las condiciones ambientales sean cálidas y estables para aumentar las probabilidades de éxito en la propagación.
Propagar tu Árbol de Jade es una manera maravillosa de compartir la abundancia y la energía positiva que esta planta simboliza. Ya sea que decidas regalar una nueva planta a un ser querido o agregar más árboles de jade a tu hogar, estarás llevando consigo un símbolo de prosperidad y buena suerte, según el Feng Shui. No dudes en experimentar con diferentes métodos de reproducción, y disfruta de la satisfacción de ver crecer tus propias plantas, creando un entorno lleno de vida y positividad. ¡Anímate a empezar hoy mismo y regala abundancia a tu familia y amigos!
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Especialista en el cuidado orgánico de Plantas y Flores
Bonjour! Soy Quentin y tras vivir en grandes ciudades como Bruselas y Sydney me di cuenta de la falta de información sobre jardinería urbana. Por ello, decidí (re)conectar con la naturaleza y aprender y transmitir mi conocimiento en el cuidado de plantas.
