envío gratis pedidos +49€
ENVÍO EN 24/48H 📦
Luz indirecta brillante
Riego moderado
Temperaturas ideales entre 15ºC y 25ºC
Araña roja y Pulgón
Pur Plant » Guía cuidado de plantas » Cómo cuidar las Plantas Pilea
Las pileas son una de las plantas de interior más fáciles de cuidar. Aunque existen varios tipos de pileas, lo que probablemente destacaríamos de ellas es que todas son muy agradecidas si le damos lo que necesitan. Originarias de las zonas tropicales de Asia, son muy decorativas y se adaptan perfectamente a espacios luminosos sin sol directo. Pero vamos poco a poco, a continuación te contamos todo sobre sus cuidados para que disfrutes de las “pilis” al máximo.
Aquí viene la parte más importante: el riego. Las pileas son plantas muy poco exigentes y suelen sufrir bastante cuando nos excedemos con el agua. Una de las mejores opciones para hidratarlas es regarlas por inmersión. Preparamos un barreño con agua destilada (en el mejor de los casos agua de lluvia) y la sumergimos unos 15 minutos. Sus raíces absorberan el agua que necesitan y pasado este tiempo, las dejamos escurrir evitando que se produzcan encharcamientos.
Otra de las mejores opciones para despistados o plantlovers que no tienen tiempo para andar con barreños es usar autorriego natural. Según el tamaño de tu pilea, probablemente necesitarán tubos o burbujas y a través de la capilaridad de la terracota la pilea absorberá la cantidad de agua que necesita, manteniendo un riego progresivo, sostenible y autónomo que además te hace ahorrar agua ¡y tiempo!
Las pileas también necesitan comida, por lo que realizar un abonado orgánico regular las ayuda a crecer sanas y fuertes.
Un buen método es añadir humus de lombriz sólido al sustrato cada 3/6 meses, sumar un puñadito de biopellet a la capa externa de la tierra y utilizar fertilizante orgánico líquido cada 15 días durante el riego (incluso añadirlo en el autorriego).
humedad y temperatura
Crecen felices con temperaturas superiores a los 15 ºC y los ambientes húmedos (aunque también sobreviven en espacios secos).
Eso sí, evita tenerlas expuestas a cambios bruscos de temperaturas.
El sustrato de las pileas es debe tener un buen drenaje, ser poroso y rico en materia orgánica.
Esta podría ser una buena receta:
1 parte de turba o tierra negra
1 parte de humus de lombriz sólido
1 parte de perlita
1/2 fibra de coco
1/2 biochar
¡Y a disfrutar de su compañía!
luz pileas
Si quieres que tu pilea crezca feliz necesita mucha luz indirecta pero nunca con sol directo (podría quemar sus hojitas). Aunque también toleran los espacios sombríos, es probable que no se desarrollen del todo bien, creciendo con tallos pelados y hojas pobres.
En cambio, si quieres lograr la hoja perfecta el mantra a seguir es luz, luz y más luz.
Las pileas son muy fáciles de multiplicar. La pilea peperomioides y la pilea moon valley son dos especies muy generosas, pues suelen tener muchos hijuelos. En este vídeo te explicamos cómo propagar y te aconsejamos usar accesorios de germinación.
macetas para pileas
Las pileas bebé crecerán felices en mini macetas. En cambio, para las pileas medianas no dudes en añadir macetas M.
Sabías que…
Las pileas no son tóxicas, por lo que si tenemos peques o peludos en casa no debemos preocuparnos por su salud. Será tu planta ideal si lo que deseas es tener una planta decorativa, que no alcance un gran tamaño, fácil de cuidar y lo mejor, 100% pet-friendly.
Elegir una pili para tu colección botánica siempre es un gran acierto.